Huawei Pura 70 Ultra, análisis: por más que intenten frenar a Huawei, un profesor siempre sabe cómo hacer los deberesRicardo Aguilar​

El apellido «P» ha acompañado a la gama más alta de Huawei durante los últimos años. Todo cambia en 2024. La nueva familia flagship de la compañía china llega bajo el nuevo apellido «Pura», y el Pura 70 Ultra es el máximo exponente dentro de la misma.

Según Huawei, Pura es una nueva era en la que celebran la creatividad, la integración de la moda con la tecnología. Es la actualización de la serie P a una nueva familia, aunque el foco sigue siendo el mismo: diseño y fotografía.

Llevo algo más de dos semanas probando en profundidad este teléfono, y tengo más que claras las conclusiones sobre el mismo. Si es o no la mejor cámara del año. Si es un teléfono a recomendar y cómo se está dibujando la nueva era Huawei con sus chips Kirin en mitad de la tormenta contra Estados Unidos.

Ficha técnica del Huawei Pura 70 Ultra

Diseño: apostándolo todo al módulo de cámara

El diseño del nuevo flagship de Huawei vuelve a ser… peculiar. Es uno de esos diseños que o se aman o sea odian, siendo irrebatible que es muy, muy atrevido. Está acabado en aluminio y cuero vegano, con una textura agradable y unas dimensiones considerables, incluso para los amantes de los teléfonos de gran tamaño. He de decir que, en lo personal, me gustaba más el acabado en cristal del Huawei P60 Pro, aunque es una percepción subjetiva. Lo que queda claro es que no ha habido salto hacia adelante en calidad constructiva, aunque esta ya era buena.

El módulo de cámara este año es aún más protagonista, puede que demasiado. Es cierto que el sensor es de una pulgada, pero en lo personal sigue sin convencerme la alineación y ubicación de las cámaras. Tampoco me ha convencido la posición de la botonera lateral: los botones de volumen están tan arriba que es imposible llegar a ellos de forma natural. Estamos ante un teléfono grande, de más de 16 centímetros, y cuidar estos detalles se hace imprescindible para mejorar la ergonomía.

El dedo pulgar recae de forma natural sobre el botón de encendido, rematado en rojo para destacar y con una pulsación sólida. Como puedes en la imagen, el módulo de cámaras es tan prominente que, prácticamente, ocupa más que el propio cuerpo del teléfono.

Si le damos la vuelta al teléfono, estamos ante el que es, con diferencia, el mejor punto de este teléfono: su parte delantera. La pantalla ocupa casi el 90% del frontal, y tiene una curvatura mucho más ligera que el modelo del año pasado, algo de lo que hablaremos más adelante.

Lo importante aquí es que los biseles siguen siendo de los más delgados del mercado y, aunque no son 100% simétricos (son, sobre todo, más gruesos en las esquinas, algo muy curioso), el frontal impacta.

Más allá de que nos pueda parecer más o menos estético, el diseño se ha cuidado. A pesar de ser un teléfono enorme es cómodo en mano, la elección de materiales es más que aceptable y tiene mucha, mucha personalidad.

Si hablamos de resistencia, este teléfono cuenta con el protocolo IP68, por lo que debería soportar inmersiones de 1,5m durante media hora. Es algo que nunca recomendamos ya que la garantía no cubre daños por agua, pero ahí queda el dato. La ventaja del cuero vegano es que no se araña ni se fractura como el cristal, aunque quedará por ver cómo soporta el paso del tiempo y la suciedad de manos y bolsillos.

Pantalla: los nits (reales) importan, y mucho

El año pasado, me encontré con la clásica pantalla curva que generaba sombras en sus laterales. Hay grandes cambios esta generación, aunque empecemos por las specs. Este 2024 tenemos un gigantesco panel aún más grande, de 6,8 pulgadas, con resolución 2844 × 1260, tecnología OLED de tipo LTPO y un pico de brillo de 2.500 nits. Huawei no ha detallado cuál es exactamente la porción del panel que logra brillar con este pico, pero puedo garantizar que estamos ante una de las mejores pantallas del momento.

Me es habitual encontrar paneles que prometen cantidades de nits abrumadoras (por lo general, picos en contenido HDR que se alcanzan en zonas mínimas del panel) pero que, bajo el sol, apenas brillan. No es este el caso del Pura 70 Ultra. Incluso bajo condiciones de luz solar muy dura, se ha comportado de forma sobresaliente.

El panel está protegido por su tecnología propia, Kunlun Glass, prometiendo ser especialmente resistente arañazos. El teléfono viene, además, con una fina lámina protectora de plástico, algo que siempre agradezco en dispositivos de gama alta a los que quizás no apetezca poner un cristal templado.

Respecto a la curvatura del panel estoy muy contento por una sencilla razón: apenas se nota visualmente. De hecho, es prácticamente imposible sacarla en fotografías. Si te fijas muy bien, verás que hay una ligerísima curvatura desde el propio bisel hasta el cristal. En otras palabras, aquí no tenemos un panel curvo tradicional, en el que nuestro dedo toca directamente pantalla. Se han curvado tanto pantalla como bisel para que haya mucha más armonía.

A nivel de calibración el trabajo es bueno, aunque quizás es un panel algo más frío de lo que solemos ver en gama alta. Desde los ajustes podemos cambiar el modo de color y la temperatura general, por lo que es algo fácil de solucionar.

No tengo la impresión de que la pantalla pueda ocupar el top 3, ya que no es la más precisa que he probado. Pese a ello, es un panel sobresaliente, con mucho brillo bajo el sol y con una resolución más que aceptable.

Sonido: una orquesta más que agradable

En el apartado sonoro, también estoy bastante contento. El sistema de altavoces del Huawei Pura 70 Ultra es prácticamente todo lo que se le puede pedir a un gama alta. Por ponerle alguna pega, no estamos ante los mejores graves de la gama alta y tampoco es compatible con todos los códecs de sonido de Qualcomm. Tampoco hay compatibilidad con Dolby Atmos, un importante hándicap a la hora de reproducir contenidos adaptados a este formato.

Respecto a la calidad pura, es alta: viene bien ecualizado de fábrica, el volumen máximo es considerable, e incluso la calidad del micrófono durante las llamadas y grabaciones de voz es bastante buena. Si conectamos unos auriculares, tendremos la opción de calibrar al gusto la reproducción multimedia.

Rendimiento: es hora de hablar de Kirin

Huawei tiene importantes limitaciones a la hora de incorporar microprocesadores en sus mejores teléfonos. Ya no puede contar con lo mejor de Qualcomm y, aunque su alianza con SMIC está dando frutos en los avances respectivos a nuevos procesos litográficos, la realidad es que a día de hoy están muy atrás. Tanto, que el Kirin 9010 que monta este procesador está fabricado en proceso de siete nanómetros, mientras su competencia ya juega con chips de 3 nanómetros.

La potencia no lo es todo, prácticamente nadie necesita el máximo desempeño, pero la distancia entre este procesador y sus rivales es muy, muy alta. En concreto, hablamos de un chip que rinde de forma similar a un Qualcomm Snapdragon 8 Gen 1 (procesador que ya era de 4 nanómetros). La traducción es que vamos a poder mover cualquier aplicación con soltura, aunque no todos los juegos admitirán la máxima configuración de gráficos.

El desempeño térmico es bueno y apenas se ha calentado. De hecho, en las pruebas de rendimiento sostenido de GPU no ha habido apenas caída. Sostener el rendimiento cuando el pico es más bajo que el resto es relativamente sencillo, no obstante, bajo opinión de servidor el asunto del chip no es del todo dramático.

Lo que sí es un problema es que este móvil no cuenta con conectividad 5G. En mi caso particular, por cuestiones laborales, trabajo con archivos de bastante peso, y me he llegado a encontrar esperando bastante por ciertas descargas cuando estaba fuera de casa. No todos los usuarios necesitarán este extra de velocidad, pero no contar con 5G en 2024 es un hándicap muy relevante.

Los 12 GB de RAM y los 512 GB ponen el toque dulce a esta tarta algo insípida, asegurándonos un buen rendimiento en multitarea y espacio de almacenamiento de sobra.

Biometría

El Huawei Pura 70 Ultra cuenta con la dupla de moda en gama alta Android: lector de huellas bajo la pantalla y sistema de reconocimiento facial 2D. El lector de huellas funciona bastante bien, pero tiene dos problemas. El primero es que la superficie de contacto es más pequeña de lo habitual. Si no ponemos el dedo exactamente en el pequeño círculo, no se desbloquea.

La segunda pega es que, siendo este un terminal muy alto en el que el pulgar recae casi en la mitad de la pantalla, no termino de entender por qué el lector se ubica tan abajo. Nos obliga a doblar el dedo a una posición algo molesta y poco natural.

Por ello, aunque el funcionamiento es rápido cuando funciona, he apostado más por el reconocimiento facial 2D. No es la solución más segura, pero funciona bastante rápido (siempre y cuando haya buena luminosidad) y hace que el tiempo de desbloqueo sea menor.

Software: EMUI necesita adaptarse (más) a Europa

EMUI. Ay, EMUI. Huawei tiene encima una situación muy complicada con la que, bajo mi punto de vista, podría intentar luchar con una aproximación algo más Europea. Sí, este teléfono no tiene servicios de Google (al menos, de forma oficial), pero la ROM tampoco parece querer adaptarse a las necesidades de los usuarios fuera de China. No es suficiente con utilizar HarmonyOS en China y EMUI basado en… Android 12, aquí. Voy a ir desgranando por qué.

Lo primero que nos encontramos es ante una carga de sugerencias de aplicaciones abrumadora, tenemos que pasar bastante tiempo tanto diciéndole al sistema, a App Gallery y al propio launcher que no queremos (porque, con alta probabilidad, no vamos a querer) instalar aplicaciones como la de ‘Mr. Wonderful’, ‘Pocoyo’ (estas dos apps están en la carpeta de Redes Sociales, no sé por qué), ‘Make Up Stylist’ o ‘Funny Animal’.

Estas sugerencias (no son apps instaladas, son accesos directos para instalar que tenemos que ir borrando), incluidas casi de forma aleatoria en las múltiples carpetas del dispositivo, son una prueba clara de que Huawei no está apostando por unas traducciones y contenido de la máxima calidad en Europa. Con un poco de paciencia podemos dejar el móvil limpio, pero lleva bastante tiempo. Entiendo que haya cierta carga de bloatware para monetizar la ROM, pero en este caso es tan excesivo como aleatorio, tanto en la selección de apps como en la categorización de las mismas.

App Gallery, un año más, sigue siendo una tienda que no me convence. De hecho, me ha resultado especialmente curioso que la propia Huawei destaca Aurora Store dentro de App Gallery como tienda alternativa. Cada vez hay más apps, sí. Pero siguen faltando bastantes y se nos sigue redirigiendo a repositorios como APKPure para descargar las que no están disponibles.

El problema de seguridad que veo aquí es que, un usuario que haya instalado APKs, sabrá que tiene que pulsar en «Download APK». Pensando en mi pareja, madre y amigos más cercanos, lo más lógico sería que pulsasen en el enorme botón de ‘CONTINUE’. Huawei declara que no es responsable de lo que suceda instalando archivos .APK de los propios repositorios a los que enlaza y, en definitiva, todo sigue como el año pasado.

No todo recae sobre la tienda de aplicaciones de Huawei y las sugerencias de apps: EMUI no aporta apenas valor añadido. Las funciones exclusivas, como Super Dispositivo, se centran en potenciar la integración entre los productos del propio ecosistema de la marca, y no tanto en darnos valor añadido desde el primer momento. Esto, sumado a un UI que lleva siendo prácticamente idéntico desde hace generaciones, hace que esta no sea una ROM que se disfrute en el día a día.

Respecto a los Servicios de Google, se pueden instalar mediante microG. Basta con instalar tres archivos .APK y ya tendremos acceso a todas las apps de Google. Pese a que dentro de microG podemos configurar que las apps de terceros se puedan conectar a los GMS (Google Mobile Services), esta solución sigue siendo un parche. Me he encontrado con juegos que no se abrían, otros a los que no he podido conectar mi cuenta de Google porque no eran compatibles con la versión de GMS de microG y, por supuesto, no podemos pagar con el teléfono mediante Google Pay.

Habrá quien quiera o pueda vivir sin Servicios de Google. Habrá a quien no le importe tener que dar ese paso adicional de configurar el teléfono mediante archivos externos para obtenerlos. En el tejado de cada usuario queda decidir si este teléfono es o no apropiado para su uso.

Autonomía: una apuesta por la carga rápida

En lo que respecta a la autonomía, tengo sensaciones encontradas. El sistema de carga rápida de 100W es brutal, y permite cargar el dispositivo por completo en unos 45 minutos. No es la cifra más rápida que hemos visto en un móvil con 100W, pero entendemos que el último tramo demora algo más para preservar la vida útil de la batería.

En tan solo 12 minutos tenemos el 50% de la batería, así que por aquí no hay problemas. Tampoco los habrá si tenemos un cargador inalámbrico que proporcione los 80W que soporta este teléfono, ni al utilizar la carga inalámbrica reversible de 20W.

Donde no estoy tan convencido es con el tiempo de pantalla. Este teléfono tiene una batería de 5.200mAh, pero la litografía de siete nanómetros no es lo más eficiente. De media, he podido obtener unas seis horas de pantalla con un uso bastante normal (algo de fotografía, mucho WiFi y poco juego), una autonomía algo justita para un móvil de este tamaño.

Cámara: a la conquista de la mejor fotografía del mercado

Hablar de Huawei es hablar de un móvil que lucha por la mejor cámara del mercado. Vamos a desgranar, en primer lugar, cómo es el hardware de este teléfono, ya que hay bastante tela para contar.

Cámara principal: 50 MP, apertura variable f/1.6-4.0, sensor de una pulgada, láser autofocus, sensor-shift OIS, lente retráctil.
Cámara teleobjetivo: 50 MP, f/2.1, teleobjetivo óptico 3.4mm, OIS.
Cámara ultra gran angular: 50 MP, f/2.2.

Hay tres grandes novedades este año para que Huawei luche por el trono de la fotografía móvil. En primer lugar, el sensor pasa a tener una pulgada (Sony IMX989), por lo que el músculo es (actualmente) insuperable. En segundo lugar, el sensor está estabilizado, una tecnología que estrenó Apple en el iPhone 14 Pro Maxpara remplazar a los clásicos estabilizadores ópticos. Y, por último, este teléfono tiene una lente retráctil. ¿Qué es esto?

La cámara del Huawei «se oculta» cuando no la usamos. En cuanto abrimos la app de cámara, la lente emerge del cuerpo del terminal. Se trata de un mecanismo que, según Huawei, aguantará más de 300.000 contracciones, impulsada por pequeños motores que la hacen emerger.

Huawei explica que esto les permite ubicar un sensor de una pulgada en un espacio más reducido, además de poder lograr mejoras en el enfoque al estar más separada la lente del sensor principal. Este último punto es fácil de comprar, pero el primero no tiene demasiado sentido. El módulo de este Huawei es uno de los más grandes que he probado, y muchos de sus rivales tienen cámaras con sensor de una pulgada en tamaños similares. Añadir un componente mecánico (con vida útil) es, bajo mi criterio, innecesario en este caso.

App de cámara

Antes de hablar de los resultados de la cámara, repasemos brevemente la app de cámara. Aquí no hay demasiadas novedades: todo luce como el año pasado.

Tenemos una interfaz muy completa, con todos los modos necesarios, configuración manual, reconocimiento de escenas, y la única ausencia destacable de Google Lens por motivos evidentes. Sigo echando en falta un lavado de cara a nivel visual, ya que la interfaz luce algo antigua y lleva sin actualizarse desde hace mucho tiempo.

Una gran novedad que está pasando muy desapercibida tiene que ver con lo que considero un cambio histórico no solo en Huawei, sino en la gama alta Android. Este teléfono tiene un modo algo «tapado» en el que he realizado la mayoría de fotografías de esta review. De fábrica, este teléfono dispara en 12 megapíxeles. Sin embargo, hay un modo de cámara que pretende emular lo que hace Apple con sus iPhone: disparar al doble de resolución.

Este modo es uno de los primeros que aparecen al abrir los ajustes de cámara, y recibe el nombre de «mejorar imágenes», función que nos apunta que se mejora la calidad en modo foto. Este modo lo que hace es pasar a disparar en 4.368 x 5824, unos 25 megapíxeles. No hay cambios en el procesado de imagen, por lo que recomiendo usarlo encarecidamente, ya que desbloquea el potencial fotográfico de este teléfono sin disparar el tamaño de archivo (unos 7MB por imagen frente a 4).

¿Por qué es esto tan importante? Porque no se debe confundir con los modos de alta resolución que, a cambio de permitirnos disparar con el sensor completo, nos suelen hacer perder el procesado de HDR que se logra con la agrupación de píxeles o Pixel Binning. Aquí tenemos la primera apuesta en Android que compite con la de Apple: aprovechar el sensor para dejar de disparar en 12 megapíxeles, tomar imágenes de mayor resolución, y no comprometer el procesado de imagen.

Me llama muchísimo la atención que, en un teléfono con 512 GB, este modo no venga activo por defecto. Huawei es el primer fabricante que lo implementa, y no hay compromisos en velocidad de disparo o rango dinámico.

Fotografía con la cámara principal

Lo primero que voy a mostrarte es una comparación entre un disparo a 12 megapíxeles frente a uno de 25. Sin ampliar, es lógico pensar que la fotografía es sencillamente idéntica. Al ampliar, nos encontramos con lo inevitable: una imagen de mayor resolución tiene mayor nitidez. Esto ayudará a que las redes sociales hagan menos daño a nuestros archivos y, en caso de que queramos imprimir alguna fotografía, no será necesario preocuparse por disparar en alta resolución a 50 MP. Dejamos activo siempre «Mejorar imágenes» y listo.

Analizando los resultados fotografía a fotografía, lo primero que tengo que hacer es quitarme el sombrero y empezar a aplaudir. Wow, Huawei. Esta cámara no es perfecta, como ninguna del mercado, pero sin duda (al menos en lo que respecta al sensor principal), estamos ante una de las tres mejores del mercado.

Me ha gustado la interpretación del color y, para mi sorpresa, lo que más me ha impactado ha sido el HDR. Cuando creía que un móvil ya no podía sorprenderme en rango dinámico, este lo ha logrado. De hecho, hacía tiempo que no veía fotografías con un rango dinámico tan completo. El balance de blancos también es bueno (aunque no perfecto), y en general tenemos imágenes muy equilibradas.

No suele quemar el cielo, pero las sombras están más levantadas de lo habitual en gama alta. La mayoría de sus rivales tienen problemas para lograr rescatar información de las zonas de sombra sin comprometer los cielos o generar cierto ruido en estas áreas oscuras. El Huawei no tiene problema alguno.

¿Cuál es, entonces, la pega de esta cámara? El algoritmo de reducción de ruido, un mal endémico en Huawei y Honor. Da igual la condición de luz: esta cámara no quiere que haya absolutamente nada de ruido, por lo que siempre trata de limpiar la imagen. Esta limpieza se acaba convirtiendo en que, al ampliar, hay zonas en las que deja de haber detalle y todo pasa a ser un zona con mucho efecto acuarela.

Estoy convencido de que, con este sensor, esta cámara podría tener mucha más nitidez. Es algo que me ha sucedido con prácticamente todos los móviles que he probado con cámaras de una pulgada: el procesado acaba haciendo que no sea para tanto. Pese a ello, si no le buscamos las cosquillas al máximo (nadie suele ampliar a estos niveles), tenemos una cámara claramente en el top. La mejor que ha hecho Huawei hasta la fecha disparando de día.

Por la noche estoy satisfecho, pero no demasiado ilusionado. Creo que hay bastante margen de mejora. El problema es, de nuevo, el lavado de ruido. Esta cámara tiene un sensor gigantesco capaz de captar mucha luminosidad incluso sin modo nocturno (no recomiendo forzarlo, el teléfono ajusta automáticamente el tiempo de exposición).

Con este músculo, sería capaz de tener imágenes mucho menos lavadas, quizás con algo de grano, pero sin diluir tanto el detalle. Huawei fue en su día rey de la noche y, al igual que dejo claro que de día es una cámara digna del top 3, por la noche no lo tengo tan claro.

Zoom y ultra gran angular

El zoom ha sido uno de los aspectos que más me ha decepcionado en este Huawei. La cámara es muy capaz, y tengo algunos ejemplos que lo muestran a la perfección. En esta primera escena, podemos apreciar que el 3.5x muestra una imagen nítida, aunque con bastante pérdida respecto al sensor principal. El 10x aguanta de forma digna, aunque como podrás ver, se deja de respetar el tono original de la escena.

El enfoque tampoco es su punto fuerte si queremos aislar elementos pequeños en la imagen. Visitando el mariposario del Parque de las Ciencias de Granada para probar este zoom, no logré ni una sola imagen 100% enfocada ni en 3.5x ni en 10x. En todas falta nitidez.

El ultra gran angular, curiosamente, es casi impecable. Tenemos una inevitable distorsión en las esquinas por la naturaleza del propio sensor, pero los resultados son brutales. No es un tipo de imagen a la que suela recurrir, pero si te gustan los disparos en ultra gran angular, este es uno de los mejores exponentes del momento.

Modo retrato

El modo retrato del Pura 70 Ultra es agresivo, aunque se comporta de una más que aceptable. El recorte separa muy bien fondo y figura en situaciones simples, aunque el bokeh natural es tan bueno que prefiero, por mucho, dejar la fotografía sin bokeh digital. Se puede regular a posteriori para rebajar la intensidad, pero noto que el retrato hace en general un procesado aún más feroz.

Al ampliar un poco, notamos que hay cierto lavado que hace perder detalle, aunque no me ha parecido dramático. Estoy convencido de que los amantes del retrato disfrutarán y mucho con este teléfono, muy rápido al disparar objetos y personas en movimiento.

Selfie

A nivel de selfie, estamos ante una de las mejores propuestas del mercado (siempre y cuando no activemos el modo retrato. Es sencillamente brutal la cantidad de nitidez que rescata, y me ha sorprendido que (por fin) este teléfono hace un buen trabajo interpretando pieles oscuras. Mi tono de piel es exactamente el que ves en la imagen, algo que históricamente no era posible captar en móviles de Huawei.

La calidad final es altísima, aunque si ampliamos notaremos que está lavando al máximo. En este ejemplo, puedes apreciar que sin ampliar todo parece brutal. Ampliando un poco resulta que el bigote se ha convertido en una mancha. Todo esto a plena luz.

Vídeo

Respecto al vídeo, podemos grabar 4K 60 FPS con una calidad buena, aunque no sobresaliente. Que el sensor esté estabilizado ayuda a que las microtrepidaciones se diluyan y, en términos generales, es un dispositivo que estabiliza bien. El problema que veo es que el vídeo también tiene cierta carga de procesado, por lo que no tengo la naturalidad que esperaría en un sensor tan grande (es más que habitual esto, por desgracia).

Huawei Pura 70 Ultra, la opinión de Xataka

Con el Huawei Pura 70 Ultra tengo una conclusión muy similar a la del año pasado con el P60 Pro. Es un móvil de fortalezas claras, y de debilidades claras. La cámara, que ya era buena, es ahora un poco mejor. Sin duda estamos ante un nuevo exponente en rango dinámico, y ante el primer Android que se atreve a disparar más allá de los 12 MP sin necesidad de usar todos los píxeles del sensor.

Es un móvil con una pantalla sobresaliente, un diseño bastante cuidado y con una configuración de memorias espectacular para asegurarnos que la RAM y el almacenamiento interno nunca serán un problema.

Pese a ello, estamos ante un móvil que quiere ser rey de la fotografía, pero que languidece en zoom. Aquí está muy lejos de los mejores del momento, en parte por unos algoritmos de reducción de ruido demasiado agresivos. Tampoco es un móvil que destaque en el apartado de vídeo, y su app de cámara está por detrás de su competencia en calidad de interfaz.

Si a esto le sumas que tenemos un procesador de siete nanómetros, sin 5G, y un software sin Servicios de Google, el Huawei Pura 70 Ultra lo tiene difícil para competir con los mejores del mercado a un precio de partida de 1.499 euros. Si, inevitablemente ofreces menos que el mercado, la cifra de inicio debería ser algo más ajustada.

Pese a todos estos hándicaps, el Huawei Pura 70 Ultra es un dispositivo único. La compañía, año tras año es capaz de ofrecer mejoras de calado en sus buques insignia. Este es el Huawei con más presencia de fabricación china, y tan solo es un anticipo de lo que la marca puede lograr con la cooperación de SMIC y el gobierno de su país.

Este dispositivo ha sido cedido para prueba por parte de Huawei. Puedes consultar cómo hacemos las reviews en Xataka y nuestra política de relaciones con empresas.

–
La noticia

Huawei Pura 70 Ultra, análisis: por más que intenten frenar a Huawei, un profesor siempre sabe cómo hacer los deberes

fue publicada originalmente en

Xataka

por
Ricardo Aguilar

.